Costa advierte efecto de las tarifas eléctricas en la inflación y prevé una mejor inversión para el segundo semestre
La presidenta del Banco Central también se refirió al precio del cobre. “Cuán permanente sea este incremento es algo que debemos evaluar en detalle, dada su relevancia para nuestra economía", indicó en un seminario de Sofofa y la UDD.
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La tarea no ha culminado. Ese ha sido uno de los principales mensajes de la presidenta del Banco Central, Rosanna Costa, en los últimos meses, y que ha vuelto a reiterar este jueves en el seminario “Nuevos Vientos de la Economía 2024: ¿Cómo reactivar la inversión?", organizado por la Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa) y la Universidad del Desarrollo (UDD).
En poco más de 40 minutos, y sin entrar en el terreno de las proyecciones ya que el instituto emisor se encuentra ad portas de publicar un nuevo Informe de Política Monetaria (IPoM), Costa repasó la evolución de la macro, y en particular los factores de costos y su efecto en la inflación.
En ese contexto, la presidenta del ente autónomo señaló que “es importante considerar las implicancias de las alzas de las tarifas eléctricas que contempla la ley sobre estabilización tarifaria de fines de abril, cuyo Informe Técnico Preliminar se puso en consulta por la Comisión Nacional de Energía el 23 de mayo”.
El Imacec de abril, dijo, confirma que “la economía se ha alejado de su punto más bajo del ciclo”. Mientras que reconoció que el número de días hábiles “tuvo un efecto importante”.
Otros elementos a considerar son los precios internacionales de los combustibles y el tipo de cambio que, afirmó, “ha tenido un desempeño volátil, aunque su nivel actual es menor al que observamos hace unas semanas atrás”.
Costa también se refirió al precio del cobre, que pese a una reciente corrección tras los máximos históricos hace cerca de un mes, ya supera los US$ 4 la libra el promedio de 2024, según Cochilco. “Cuán permanente sea este incremento es algo que debemos evaluar en detalle, dada su relevancia para nuestra economía. Un alza más duradera del cobre podría tener efectos importantes sobre el gasto interno, que trasciendan a otros rubros distintos de la minería, además del empuje que podría dar a las expectativas de los agentes”.
A su vez, los efectos sobre la inflación pueden diferir entre el corto y largo plazo, dependiendo de cuánto impulso adicional genere, señaló la timonel del Consejo. “Por lo pronto, esto ha impactado positivamente los términos de intercambio de Chile”, sumó.
Hacia adelante, Costa delineó que uno de los retos que tiene el país es cómo crecer más. Para ello, “la productividad es uno de los elementos esenciales, lo mismo que el cuánto y en qué invertimos”.
De cara al segundo semestre, las perspectivas para la inversión son “más positivas”, mencionó la economista en la sala de conferencias de la Sofofa. Esto gracias al aporte del descenso de las tasas de interés, de la reducción gradual del tipo de cambio y una economía que irá transitando hacia su crecimiento de tendencia.
A modo de contexto, el último IPoM proyectaba una caída de 2% para este año en la formación bruta de capital fijo (FBCF).
La economista también resaltó que “hoy es un hecho concreto, y ya no una proyección, el descenso que ha tenido la inflación en Chile y el mundo tras los máximos observados en años previos”. A nivel local, resaltó en esa labor la contribución de la política fiscal.
Señales dispares en actividad
Costa también tuvo palabras para el Índice Mensual de Actividad Económica (Imacec) de abril, que creció un 3,5% anual. A su juicio, la cifra confirma que “la economía se ha alejado de su punto más bajo del ciclo”. Mientras que reconoció que el número de días hábiles “tuvo un efecto importante”.
Y añadió que “parte del mayor impulso que observamos al inicio del año respondía a elementos de oferta que irían desapareciendo”. A su vez, la economista divisó una “heterogeneidad” entre sectores.
En esa línea, destacó la “resiliencia” de las actividades de servicios, y cómo el fortalecimiento de la demanda mundial, entre otros factores, ha favorecido el intercambio con el exterior y el desempeño de algunas ramas del comercio e industriales ligadas a exportaciones.
En la otra vereda, el comercio más relacionado con el consumo de bienes de los hogares “ha tenido un despegue más lento, de hecho, en lo más reciente muestra descensos en sus niveles desestacionalizados. Por su parte, la construcción exhibe un débil panorama, en especial en el segmento de edificación”, explicó la presidenta de la entidad.